Jinete en un caballo sin control

Produzco todos los sábados, el programa REALIDADES, allí siempre toco temas nodales de la vida nacional y de interés colectivo, cada tema lo investigo como si fuera un experticio del FBI; En todas mis investigaciones quedo satisfecho; Mas sin embargo recientemente lleve como análisis la situación de los combustibles en la República Dominicana, les confieso quedar muy sorprendido con los datos obtenidos y procedo argumentar ahora algunas aritas de las cuales me gustaría que ustedes meditaran: Lo primero que deseo hacer entender es que frente a este delicado problema en nuestro país tenemos obligatoriamente dos marcos de referencia, uno es la condición de compra de petróleo a nivel internacional (Brent & WTI) y la segunda es la aplicación de la ley 112-00 que sirve para aplicar los precios semanales de los combustibles; Con respecto a la compra de petróleo, todos, así lo creo, estamos de acuerdo que por la inversión de peso frente al dólar, estamos compelidos a comprar el “oro negro” a precio sin regateo, mas sin embargo aquí hay dos factores importantes: Cantidad de pesos invertido por cada dólar y los precios de compra por cada barril de petróleo, este problema de los precios internacionales del petróleo nos pone en una gran encrucijada, pues están sujeto al humor de dos ó tres sultanes dueños de pozos petrolero, que provocados por EEUU, desatan su furia con este juego de los precios del preciado liquido. Como podemos observar son factores exógenos que gravitan en nuestra economía de manera contundente; Ahora bien, Que de la ley 112-00 de “hidrocarburos”? Esta ley es la que regula en un marco legal para procesar los precios cada siete días. Es preciso mencionar que en todos los países del área, excepto tres Panamá, Venezuela y Ecuador, existen leyes iguales a estas para regular los precios de los carburantes, esto así por interés de los organismos de crédito extranacionales que se rehúsan a desembozar sus divisas si esta no son cobradas por los gravámenes deducido a través de dicha ley y por consiguiente el ad valórem a los carburantes. Visto así entonces contamos con dos factores primordiales que inciden de manera insoslayable en el precio final de los combustibles. Ahora! ¿Que de cierto es, que la República Dominicana paga la gasolina mas cara de nuestra región? Esto es ciertamente irrebatible, pero tiene una explicación lógica y sencilla: Al nuestro país verse al borde el colapso en el pasado reciente por la desastrosa política económica, el gobierno anterior se vio obligado a firmar con el FMI, y al mismo tiempo que el gobierno de turno (PRD) duplicaba el volumen de la deuda externa; Entonces, por la duplicación de la deuda externa, la insostenibilidad de la deuda social y mas aun el déficit cuasi fiscal, estos tres demanes económicos juntos embrionados en un gobierno sin control, hicieron que las entidades crediticias nos desmotivaran empréstitos al caer en default, y ahora nos vemos obligados al proceso mencionado anteriormente, pues a mayor deuda externa, mayores impuestos pagamos a través de los combustibles, y consecuentemente con estos crece la animadversión social que se traduce en descontento hacia el gobierno.
Hacer entender esto a un ciudadano común, es tratar de dar un salto cualitativo en la vida social de nuestro país; Pues bajo el marco de la ya mencionada ley, en tres de sus considerando (5,6,7) preconiza muy claramente el evidente compromiso al estamos obligados.

Esta situación, en ocasiones se torna inmanejable pero si motivamos el avance del pago de la deuda externa y moderamos el uso de los carburantes, podrían ser estas ecuaciones que nos lleven a una reducción amplia en los carburantes, pero no es como se pretende falsamente proclamar que es una carga, que el gobierno a la brava coloca, se trata de un caballo sin control, indómito, el cual el jinete ha tratado de enderezar con nuestra evidente estabilidad económica, a todos nos compete propagar el buen uso de los carburante para nuestro bienestar futuro.

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